El pasado domingo, 5 de abril, sí pude volar. Me compré la carta 1:200.000 del Instituto Geográfico Nacional (la he escaneado, pero no la cuelgo porque no sé si es realmente útil así), hice un nuevo plan para Marugán, y Jesús me dijo que estaba bien salvo por una cosa que corregí. Pero el tiempo tampoco estaba muy bien; había bruma y viento, y me dijo que igual teníamos que ir a Robledillo, así que también rehice el plan (no lo cuelgo, porque lo tengo que cambiar).
Así que ahí me planté el domingo, con todos mis trastos y listo para hacer un fácil viaje de 20 minutos. Pero fue un desastre total: nada más salir ya estaba perdido; salí bastante al norte del punto eco, y tardé un montón en ubicarme, y eso con la ayuda de Jesús.
La aproximación y toma en Robledillo, pues bueno; pero la vuelta, que ya iba bien avisado, pues igual: según salgo, hale, ya perdido otra vez. Y hale, en dirección directa hacia Barajas... ahí, hasta que Jesús no me dijo un pueblo, no me ubiqué.
En fin, un desastre. Tengo que escoger un punto de referencia que conozca, y ahí empezar la ruta; tomar tiempos y rumbos. Nada del difuso punto eco, sino sobre la pista.
¡Bueno!, pero mira, por una parte estoy contento. Según aprobé el examen, me quedé ahí sin objetivo concreto. Ahora ya sé algo claro que aprender: a ir a Robledillo y a Marugán, sin ayuda y sin perderme. Y después, ya puedo buscar otras rutas que hacer...
Ah, por cierto: me topé con el SIGPAC, un fantástico sistema de consulta de cartografía nacional, mezcla de varias cartas y ortofotos.
Y también terminé, por fin, la revisión de los exámenes de Millaerea. Bueno, terminar no por completo; aún tengo que crear un documento resumen con todos, y los comentarios, casi todos de Adolfo. Que, por cierto, no sé si se ha mosqueado porque le discutí algunos de ellos, porque no volvió a ponerme más... en fin, qué se le va a hacer.
Y también encargué y recogí los parches de la promoción:
No me terminan de convencer (ese de ahí tiene las líneas de los dientes repasadas con rotulador, que si no no se ven), pero tampoco están mal. Ahora tengo empezado otro, de aviadorzuelo, y más cosas por hacer. Ya digo, que no saco tiempo.
Otra cosa que ha pasado es que AEPUL se ha renombrado como AEPAL (aviación ligera, en vez de ultraligeros). No sé yo si tiene mucho sentido (ej. para eso está ya AOPA-Spain), pero bueno, ellos sabrán. También tienen sus razones; el mundo cambia. Yo estaba esperando a tener la licencia (no, aún no ha llegado) para apuntarme, pero ahora ya veré qué hago. Han cambiado hasta el logo, y ahora es más feo...
Y algo que va a pasar los próximos 17 y 18 es que ¡comienza la Red Bull Air Race 2009! Aunque no sé si voy a poder verlo en la tele, porque TVE no está en la lista de televisiones que lo van a emitir.
Hale, eso es todo, amigos.
