lunes, 11 de octubre de 2010

A ver si para antes de noviembre...

Pues sí, a ver si para antes de noviembre Pancho está arreglado y podemos volver a volar con él. Al menos ya hemos pedido las piezas, que deberían llegar dentro de una o dos semanas. Hay que ver; 4 meses con el avión parado, y todo por una tontería. Uno de los socios insistía en que la reparación era mucho más sencilla, que sólo había que reparar algunas piezas dañadas, y no comprar nuevas... quizás tuviese razón, pero...

En fin, tengo aún 39 minutos de saldo en Loring, así que espero poder gastarlos un día de estos en un vuelín a la Fuenfría. Y como no practico el vuelo, hablaré de otras cosas. Hace poco me terminé "Sáhara - la última misión", de Miguel Gilaranz, que vuela en Loring, aunque no lo conozco (de hecho, compré el libro la última vez que estuve por allí, y es en Loring donde comienza la historia). Es un libro pequeño, y en mi opinión un poco descompensado entre acción y descripción, pero se lee bien y cuando por fin se desencadena la acción se hace bastante interesante. Por cierto, no tiene nada que ver con la película del mismo título. Por lo demás, contiene bastante información de interés sobre el vuelo en ultraligero, así como sobre algunas costumbres en el Sáhara.

Otra cosa que he hecho hace poco es volver a ver "Porco Rosso", una de las pelis de Hayao Miyazaki que más me gustan. El protagonista es un ejemplo de esos hombretones valientes, capaces, independientes, decididos, y encantadores tanto para hombres como para mujeres, como podrían ser Corto Maltés, Rick de Casablanca, Indiana Jones, o tantos otros. Su mayor diferencia con ellos es que... es un cerdo. Pero literalmente; no es que sea mala persona, sino que fue transformado en cerdo por una maldición. Ese debe de ser el toque fantástico japonés al arquetipo de héroe solitario.

Se trata de una película de aviones; en concreto, de los hidroaviones que hicieron progresar la aviación allá por los años 20 y 30 del siglo XX, espoleados por la Copa Schneider. Muchas de pelis de Miyazaki muestran a las claras su afición por volar: Nausicaa del valle del viento, El castillo en el cielo, El castillo ambulante son bastante claras, y en casi todas se puede encontrar alguna escena de vuelo chula. No obstante, no hay que pensar el vuelo es la principal temática de las películas de Miyazaki, sino sólo un aderezo; la mayoría de las mismas comparten una temática fantástica, con un protagonista femenino muy joven, y un mensaje conservacionista.

Por cierto, que parece que Miyazaki planea hacer una segunda parte de Porco Rosso ("Porco Rosso: la última salida"), y además, ambientada en la guerra civil española. Qué maravilla; quizás vea a Porco Rosso pilotando un Polikarpov I-16 "Mosca". No sé bien por qué, esos aviones me atraen, pues tampoco son gran cosa. Aunque cuando salieron supusieron un importante avance, su premacía duró poco, pues fueron prontamente superados por los Bf 109 (Messerschmitt 109), Spitfire y hasta los Hawker Hurricane. Aún así, no sé por qué me resultan tan chulo. A ver cuándo consigo, y me puedo leer, el libro de "El seis doble".

Bueno, pues eso es todo, amigos...