miércoles, 28 de octubre de 2009

Ocaña

Pues sí. Había planeado ir a Ocaña el 17 de octubre, en coche y para las jornadas de seguridad en vuelo de AEPAL. Pero estuve de viaje de trabajo el jueves y viernes anteriores, y no era plan de abandonar de nuevo a la familia un sábado entero. Llamé a Rafa a ver si había hueco, pero ya no, así que llamé a Jesús, y con él sí.

Fuimos por la misma ruta que seguí con Adolfo, y me salió bien, casi no me despisté. Además, esta vez tomamos en y despegamos de Ocaña, como atestiguan estas fotos que tomó Jesús:


Esta la sacó al despegar:


Como me salió bien, he colgado el plan, con todas las notitas super-detalladas que me hago que son lo que permiten que, al final, no me pierda (aún tengo que actualizar mi chuletario para hacer planes). Lo único malo del viaje fue el tránsito por Casarrubios, donde hay bastante tráfico y hay que estar muy atento para ver a otros que pasan por ahí, los que notifican y los que no.

Y con eso gasté mi saldo de horas en Mydair (de hecho, me pasé y tuve que pagar la diferencia a Beni). Ahora, a ver si gasto las que me quedan en Loring. El siguiente plan: Alcazarén, yendo por el Puerto de Guadarrama, y volviendo por La Salceda-La Acebeda. Con un P92 debería ser menos de 1h cada tramo. A ver si a Rafa le parece bien, y el tiempo lo permite... había quedado con él para el día 7, pero luego ha surgido un plan familiar, así que lo tendré que cambiar al 14.

Después haré vuelitos para consumir las horas, y a ver si me pongo a buscar un Coyote / SkyRanger / lo que sea a compartir, que en primavera me gustaría hacer mi primera travesía solo. Aunque a mi mujer no le hace ninguna ilusión eso de que me compre un avión de segunda mano y con partes de tela... en fin, ya se verá.

Eso es todo, amigos

martes, 13 de octubre de 2009

No sé para qué me meto...

... donde no sé. Ayer mismo publiqué una entrada sobre el borrador de la nueva normativa de ULM, pero lo acabo de borrar. Porque una cosa es opinar libremente, y otra pontificar sobre lo que no se sabe; proponía cosas sobre las que realmente no tengo conocimiento suficiente.

Por cierto, que AEPAL ha publicado la lista de alegaciones que ha hecho a AESA, en espera de iniciar negociaciones al respecto.

Este sábado es la última edición de las jornadas de seguridad en vuelo... y parece que no voy a poder asistir. Me habían cambiado una cosa del trabajo, e iba a apuntarme mañana, pero hoy me ha surgido una nueva con la que estar todo el sábado fuera de casa resulta poco compatible.

En fin, ya veré, pero me temo que me quedo sin ellas. Eso es todo, amigos

lunes, 5 de octubre de 2009

Sotos

Anteayer volé con Jesús desde Robledillo a Sotos, algo al norte de Cuenca. Resultó ser un vuelo muy gratificante, pues además de que me perdí muy poco (igual que en el anterior a Ocaña, aunque me despisté un par de veces, luego supe reconocer dónde estaba), es que Jesús me dio la enhorabuena. Pocas veces me había sucedido eso; normalmente le tengo al lado, mosqueado por todas las cosas que hago mal, corrigiéndome una y otra vez. Pero anteayer no, aunque me iba apuntando cosas que veía en el mapa 1:200.000 que llevaba (y ayudándome los tramos que me perdí), en general se le veía relajado, y dijo que le transmití seguridad. Viniendo de Jesús, eso es todo un elogio. Este soy yo frente al Eurostar de Mydair, allí en Sotos:



Y aquí estoy frente a un pepino gigante (un Dromader) que usan para la lucha contra incendios:



Además, en el campo había un motovelero, con matrícula alemana pero cuyo dueño parecía español, que iba a salir cuando calentase un poco más (nosotros llegamos alrededor de las 9:15, y nos fuimos enseguida).

Aparte del contento porque me saliese bien la navegación, el viaje me gustó mucho porque el paisaje alrededor de Cuenca es muy bonito. La vista de la pequeña ciudad, encajada en varios cañones de ríos, y con un pequeño lago de nubes en el valle a su norte, es muy cuca (tengo que empezar a hacer fotos). La rodeamos por el este y subimos hacia Sotos, que afortunadamente estaba libre de esas nubes, y tomamos sin problema entre un par de bosques de pinos. Entonces pude imaginarme futuros viajes de fin de semana (o más, si se puede), de aeródromo en aeródromo, a cuál en un paraje más bonito, y pasando la noche en tienda de campaña junto al avión, o en un hotelito visitando una ciudad con encanto... eso es lo que ando buscando.

Yo creo que los medios de transporte (coche, moto, avión, barco) tienen dos usos principales, y que son los que los hace atractivos a mucha gente: uno, la emoción y la velocidad (apurar las curvas, sortear coches, hacer acrobacias, ganar regatas); y otro, la libertad e independencia de poder ir de un sitio a otro a voluntad, y a ser posible por sitios bonitos. En ambas vertientes, en mi opinión el avión sobrepasa a los otros medios, aunque eso ya va en gustos. Sea como sea, como yo no estoy ya para los trotes del riesgo y la emoción (por cierto, al fin Bonhomme ganó la Red Bull Air Race en Barcelona, y por fin La Sexta ejerció los derechos que tenía y retransmitió imágenes de la misma), me quedo con los viajes, que es a lo que aspiro con el avión.

Mis siguiente plan es estarme un mes sin volar, para asistir el día 17 a la última jornada de seguridad en vuelo de AEPAL, que creo que me vendrá muy bien. Aunque no sé si al final voy a poder, porque parece que voy a tener un viaje de trabajo toda la semana siguiente a ese día, y no es plan de dejar a la familia sola todo un sábado, y luego desaparecer una semana entera. Ya veremos... luego, tengo pensadas dos travesías más: primero, volver a Ocaña a ver si esta vez podemos tomar; y luego, ir hasta Alcazarén, a visitar a Hugo, pero en avión.

Y más adelante, tengo en la cabeza ya serios planes de meterme en un avioncillo compartido. Planes modestos, con un presupuesto de unos 4.000€ para entrar, ej. en un Coyote o SkyRanger entre 4 personas. Con el Coyote eso parece fácil de conseguir; sólo buscando se encuentran unas cuantas ofertas en Brunete, Casarrubios y Camarenilla. En Robledillo también venden al menos uno, y en Loring hay tres compañeros buscando otro...

Espero poder hacer realidad esos planes, y en algún momento de la primavera de 2010, hacer mi primera travesía solo... no es mi principal objetivo volar solo (insisto, a mi mujer, aunque no le guste que vuele, estoy seguro de que le encantarían esas escapadas), pero es otro hito que debo conseguir para afianzar mi propia seguridad. Porque, aunque ahora esté más chulo que un ocho, el sábado seguí cometiendo bastantes errores, y anda que no me quedan cosas por aprender...

Y eso es todo, amigos.

(Casi) Ocaña

Hace ya un par de semanas, el 20 de septiembre, fui con Adolfo a Ocaña. Llegamos sólo hasta cerca de Aranjuez, porque había bastante neblina y nos volvimos, pero desde el punto de vista de la navegación fue bastante satisfactorio. Tuve un par de momentos donde no sabía bien dónde estaba (incluyendo el ya habitual tramo entre Torrelodones y Villanueva del Pardillo), pero lo bueno fue que después me supe encontrar, y el resto del viaje estuve localizado todo el tiempo; incluso en el tramo desde Casarrubios hacia Ocaña, donde hay menos referencias y es más fácil perderse.

Por supuesto cometí otros errores. El peor fue que, en la ida, casi invadí el circuito de tráfico de Casarrubios; tendría que haber planeado rodearlo con más margen. Además, me cuesta enterarme de lo que dicen por la radio. Y a la vuelta, aunque no fue un error mío, estábamos rodeando Casarrubios también y acabábamos de notificar nuestra posición, cuando oimos por la radio "matrícula, al sur de Casarrubios, con tráfico a la vista". "Eso somos nosotros", dijimos, y efectivamente nos pasó zumbando otro ultraligero, en sentido opuesto, y a escasos 50m de donde estábamos. Buf... me dio miedo, es fácil llegar muy cerca a donde está otro, sin llegar a verlo hasta entonces.

Adolfo me dijo que había mejorado mucho desde la última vez, lo cual siempre es muy satisfactorio. Cuando vuelva por Loring intentaré repetir la travesía, a ver si tomo en Ocaña. Aunque la verdad es que el paisaje es bastante feo, pero me hace ilusión visitar y aterrizar en aeródromos nuevos. Ah, y además, ahora parece que resulta que el tramo entre Colmenar y Villanueva del Pardillo es mejor hacerlo directo hacia el suroeste, dejando Torrelodones a la derecha en vez de a la izquierda, como la primera vez que fui con Jesús... yo no entiendo. En fin, la próxima vez confirmaré y si es necesario actualizaré el plan.

Así pues, las horas invertidas en estudiarme la cartografía 1:200.000 y el Google Earth sirvieron para, volando con el mapa 1:500.000, no perderme. He insistido en utilizar el 1:500.000 porque todo lo que leo dice que es lo que hay que hacer, aunque como claramente el detalle es insuficiente para una buena identificación visual, lo complemento con estudiarme el 1:200.000, y trasladar al plan todas las indicaciones sobre navegación visual que puedo. Eso es lo que me lleva más tiempo; intentar imaginarme lo que habrá en un sitio cuando llegue, si habrá elevaciones significativas o peligrosas, corregir el rumbo para pasar por una referencia más visible o evitar una altura (o sea: borrar los trazos con alcohol, volver a hacerlos, volver a medir ángulos y distancias, corregir la hoja de cálculo)... pero bueno, bien está si sirve para no perderme. Y una vez el plan tiene todas las notas, puedo llevar el 1:500.000 durante el vuelo, que es mucho más manejable, y además tiene información muy importante, como zonas prohibidas u obstáculos (líneas de alta tensión, molinos de viento, antenas, ...)

Lo siguiente que hice fue un vuelo a Sotos con Jesús, pero eso lo cuento ya en la próxima entrada en este diario... así pues, eso es todo amigos.